Vía verde Argelès-sur-mer – Le Boulou
Esta ha sido mi escapada este verano Argelès- sur-mer en el pirineo francés, una zona preciosa. Fue una cosa de última hora. Me encontré con 4 días libres y después de tanto examen y de tanto trasladar harina de un lado para otro necesitaba salir de Barcelona y desconectar un poco antes de enfrentarme con la mudanza. Acabé en Argelès porque admitían perros, no era excesivamente caro y estaba cerca. Así que para allá que nos fuimos, Estrellita, la frago, la bici y yo.
El primer día intenté hacer una ruta por el paseo marítimo que me recomendaron en la oficina de turismo, pero al cabo de 2 o 3 kilómetros aquello se convirtió en una playa pura y dura, así que desistí y salí a la carretera. Inmediatamente encontré un cartel anunciando la ruta y por ahí seguí hasta que no sé muy bien cómo acabé dentro de un camping!. Di media vuelta y me metí por un camino que salía a mi derecha, pero tampoco tuve mucho éxito, tras bordear una especie de campo de entrenamiento me encontré con una valla que me cortaba el paso. Así que fracaso total. Eso sí Estrellita lo pasó bomba.
Al día siguiente, optamos por hacer la vía verde que une Argèles sur mer con le boulou, teóricamente son 18 kilómetros, aunque deben ser unos 21 porque la ruta empieza oficialmente cuando ya llevas cómo un kilómetro pedaleando y acaba en mitad del campo. Es una ruta líneal (contando con la vuelta unos 40-42 km reales) que circula por regla general, paralela a la carretera.
La ruta en sí no tiene gran cosa, va pegada a la autovía, hace un calor del diablo incluso a mediados de septiembre y no hay una sombra. Lo realmente chulo de la ruta es que cada 3 o 4 kilómetros hay pequeños pueblos que forman parte del Camino de Santiago con iglesias románicas y prerománicas, siglos IX, X y XI. También, está plagado de granjas en las que venden productos ecológicos y especialidades locales. La vía en sí está perfectamente señalizada, lo complicado es llegar hasta ella. Os dejo un mapa orientativo, ampliándolo se consigue llegar.
El tercer día hice la excursión en coche, para cubrir más terreno y también por qué no decirlo, porque implicaba subir los pirineos, otra gozada de paisajes, iglesias y pueblos medievales. En conjunto. los Pirineos Orientales son una excursión que merece la pena y que está a 3 horas de Barcelona conduciendo con toda la calma
Más información:
- Voie verte entre Argelès-sur-mer et Le Boulou: conseil générale pyrénées Orientales.
- Ruta en wikiloc
- Argèles sur mer: información turística
3 rutas por el Delta del Ebro
Tres días pedaleando por el paraíso, no puedo decir otra cosa. Lo organizamos de un día para otro; más bien no organizamos nada y nos tiramos a la piscina directamente. En el Hotel el primer día nos proporcionaron un mapa general del parque con las diversas rutas y mientras cenábamos en un bar del pueblo, nos organziamos las rutas, saliendo de Ampostá. Al final este mapa que nos dieron en el hotel nos resultó mucho más útil que los itinerarios ciclistas que hay colgados en Internet y los que nos dieron en la casa de fusta porque nos daba una visión más general y nos permitía enlazar unos caminos con otros y hacer rutas más largas que las propuestas.
Leer más…Preparando ruta por el Delta del Ebro con perro
Sigue ahí picándome. Diciéndome, ven. El pequeño vistazo que le eché el otro día al parque natural del parque del Ebro ha sido suficiente. En realidad este post es un ejercicio privado para apuntarme datos que me van a ser útiles a la hora de organizar el viaje.
No sé cuándo voy a ir, ni cuántos días, tampoco sé si voy a ir sola o acompañada pero lo que sí que tengo claro es que voy a ir con perro. Así que la primera pregunta es ¿Dónde voy a dormir? El camping es la opción más obvia, pero si puedo elegir prefiero un alojamiento rural.
Mi primera opción a sido aturebre pero sospecho que el buscador no funciona porque no me ha dado ningún resultado ni con animales ni sin ellos en ninguna fecha a lo largo del 2011. En turisme ampostá he tenido más suerte, al buscar alojamientos rurales lo primero que aparece es un pdf con los establecimientos en los que sí admiten animales, eso sí luego hay que ir contrastando cada uno de ellos con el listado, lo que lleva su tiempo, así que para facilitarme un poco las cosas ahí va: Leer más…
Un paseo por el Delta de Ebro
Hace muchos años, conocí a un chico de Tarragona que hablaba maravillas del parque natural del Delta del Ebro, especialmente para andar en bicicleta, pero por aquél entonces no montaba en bicicleta y Tarragona no me quedaba muy a mano. Ahora, resulta que paso por ahí cada vez que hago el recorrido Cabo de Palos Barcelona y esta vez… no pude resistir la tentación ; como me tocaba ya la segunda parada del viaje, cogí la salida 41 pensando que siempre sería más bonito cualquier bar que me encontrara en el camino que una estación de servicio de la carretera. No me equivoqué.
Nada más entrar en el pueblo encontré un bonito bar, conseguí aparcar unos 30 metros más adelante y cuando me disponía a ir para allá, descubrí un precioso paseo al borde del río, perfecto para pasear a la perra y… para dar un paseito en bici 😉
Fueron apenas 4 kilómetros ida y vuelta y a paso de tortuga porque iba con Estrellita y sin cesta, pero fue un ratito glorioso después de 450 kilómetros de coche y con otros 200 por delante.
Me gustó tanto que decidí perder unos minutos y pasarme por el centro de información turística y hacerme con unas alguna ruta cicloturisma e información sobre alojamientos. Estuve casi una hora dando vueltas por el pueblo hasta que finalmente tiré la toalla y me di por vencida… al fin y al cabo ¿Para qué está internet?
Parque Natural del Delta del Ebro
- Página de la Generalitat de Catalunya
- Diputación de Tarragona
- Rutas cicloturistas
- Amposta: www.turismeamposta.cat/
- L’Aldea: www.laldea.org/
- L’Ampolla: www.ampolla.org/
- Camarles: www.camarles.es/
- Deltebre: www.deltebre.net/
- Sant Carles de la Ràpita: www.turismesantcarlesdelarapita.org/
- Sant Jaume d’Enveja: www.santjaume.org/
- Patronato de Turismo de Les Terres de l’Ebre: www.terresdelebre.org/
Ese oscuro objeto de deseo
No la mencioné cuando reflexionaba sobre qué bicicleta plegable comprar porque era una de esas que «se sale completamente del presupuesto«. Una Dahon Speed TR. ¿Y por qué esta bicicleta en concreto? Porque para mí es importante poder subirme en un tren para una excursión de fin de semana con mi bici; más que eso, es fundamental. Así que, aunque se salía por completo de mi presupuesto, busqué información sobre ella, su comportamiento en viaje, pregunté en varias tiendas, miré catálogos…. Y aquí está ese bellezón.
Fui a recogerla ayer, a Ciclos Moratalaz y el señor de la tienda (Jose Luis) y yo babeábamos por igual al mirarla. Eso me hizo gracia. Era obvio que le parecía un bicicletón y es un bicicletón. Todo en ella está pensado hasta el más pequeño detalle. Quizá le sobran unos cuantos cables pero es un flipe de bici. Es robusta, con el cuadro de acero, pesa poquísimo y se pliega en 3 movimientos. Tiene portabultos delantero y trasero, dinamo para la luz delantera, y hasta un cargador USB para el movil, el ipod, el GPS o lo que que se te ocurra. El manillar es increíblemente ajustable, acostumbrada a la mtb, el poder regular el manillar a la altura/posición que más cómodas me resulten, me hace dar botes de alegría.
Lo mejor de esta bici, es que no sólo me va a permitir moverme por Madrid, cogiendo el metro y el Tren de Cercanías a la hora que quiera, sino que además me permite viajar con ella. Porque… Si quieres irte un fin de semana a Asturias con tu bici, lo más práctico es coger el tren, pero entonces ¿Qué haces? ¿Te limitas a circular por pueblos, carreteras y caminos asfaltados? Cómo sabes que no te vas a tener que meter por un camino de tierra para llegar al lago en el que te apetece darte un chapuzón? La speed TR es una bici dura y polivalente dónde las haya.
Hoy la he cogido por primera vez. Me he hecho un pequeño recorrido desde casa hasta Hypercor (para practicar cuestas) y ha sido un auténtico placer. He tenido que parar a ajustar el sillín varias veces (no he tomado la precaución de «medirme» y lo he hecho a ojo de buen cubero y así me ha ido). También, al poco de salir de casa se me ha caído el iman, al volver a casa lo he recolocado en su sitio con una llave inglesa. Por lo demás, he llegado sin novedad y sin grandes sufrimientos. Cómoda, dura, fiable… Ya iremos viendo. Necesito averiguar cómo colocarle un portabidones, me niego a llevar el agua a la espalda, que hace musho calor.
Seguiremos informando, me voy a dar una vuelta en la bici.
PD: 2 Rutas por Aravaca, desde la Estación de Cercanías de Arava hasta Hypercor y hasta la Avenida de Valdemarín, dos rutas cortas y empinaditas, para ir practicando las cuestas de marid.
La vía verde del tajuña
Mi primera vía verde, por fin! Tantas veces planeando hacer la vía verde del noroeste y que no había manera y de repente surge la posibilidad de hacer la vía verde del tajuña. Y no pudo haber sido en mejor compañía!
En vista de que subir a Navacerrada y a la Fuenfría era un poco fuerte para las novatas… optamos por hacer la via verde del Tajuña. Desde el principio hubo una química estupenda y nos pasamos el día comportándonos como niños, haciendo el ganso, riéndonos, pasándolo fenomenal.
El agua fue la protagonista del día, lo de la piscina de ambite fue lo mejor, un hurra por la socorrista que nos dejó hacer el ganso todo lo que quisimos
Y más:
También montamos en bici, y vaya si montamos en bici, 100 km a pleno sol con un calor que superaba los 40º de largo por el «efecto horno» del valle. Al cabo de un rato el agua parecía Té y no había muchos sitios dónde «repostar». A ratos estuve tentada a tirarme a la acequia y creo que no fui la única. Mil gracias a mis cuidadores que se lo tomaron con muuucha filosofía cuando casi me desmayo a 40 kikómetros del objetivo 😉
Y por supuesto, no nos olvidamos de la selección, no era fácil llevar la bandera con la que estaba cayendo!
En resumen, si se me permite la expresión (y si no también) un día co – jo -nu – do.
- La ruta: Via verde del Tajuña
- Distancia: 98 km +2 de ida y vuelta al metro.
- Cuestas: Suaves pero largas
- Nota: Es mejor hacerlo en primavera y en otoño. En verano el calor y el agua pueden ser un problema.
El bicilunes
Uff, 20 de Junio. Anda que no ha llovido. Llevo 3 semanas que no sé muy bien qué le ha pasado a mi vida que me faltaban las horas. Pero bueno aquí estamos de vuelta. Han pasado muchas cosas.
Los estrené en el bicilunes , yo cuando vi aquellas cuestas… creí que me daba un tabardillo. Las cuestas de Madrid no son un mito. Pero tampoco son para tanto. A la vertiginosa velocidad de 4,5 km/h pude con ellas. No tuve que bajarme. Así que si yo puedo, cualquiera puede. Y no pasé miedo en ningún momento, Aravaca me cuidó y me esperó toda la ruta. Eso sí para poder hacerla en condiciones, tengo que entrenar un poquito con las cuestas.
Prometí explorar una ruta a la casa de campo desde la Av. de Europa por la Universidad o por Húmera. Eso hize y casi me da un tabardillo con tanta cuesta (me adelantaban hasta las abuelas en patinete): Conclusión, para ir a trabajar hay que tomar la entrada de somosaguas, si entras por Húmera: mtb y a sudar.
Mañana por la mañana cojo la bici otra vez, porque con tanto lío casi no la cojo y el domingo con los de rodadas voy a morir y voy a tener que esperar a que vuelvan sentadita debajo de un árbol con la merienda 😛
Cabo de Palos – Puerto de Tomás Maestre
Sé que a mucha gente no le gusta este paseo, es todo urbano, por un carril bici que aparece y desaparece… hay trozos de la Manga en los que ya empieza a oler fatal… pero a mi me gusta hacérmelo de vez en cuando, sobre todo en esta época. Cuando tienes poco tiempo, necesitas abrir el espíritu, estirar las piernas y sacar la porquería fuera, este circuito es perfecto (al menos para mí lo es).
El carril bici de La Manga es peligroso, tiene mil cruces y salidas de callejuelas y garajes, desaparece, pasa pegado a coches aparcados en batería y todos los pasos de peatones están pensados para que el peatón espere precisamente en el carril bici (los botones de «espere verde» suelen estar situados en la mediana entre el carril bici y la calzada), así que hay que ir con 1000 ojos y eso es precisamente lo bueno. Porque por otra parte, en esta época del año no hay todavía mucha gente y suele estar despejado, y si tienes ganas de hacer piernas siempre te puedes subir el Monte Blanco hasta el mirador a la ida y a la vuelta.
Son 26 kilómetros, así que yendo muy tranquilo, en hora y media como mucho te lo has hecho. Tiene la ventaja de que todo el camino está lleno de tiendas, bancos, bares y hasta un buen taller de bicicletas con tienda de repuestos, así que de paso se puede aprovechar y hacer unos recados. Y si el tiempo lo permite te puedes pegar un chapuzón en las playas del final de la Manga que ahora están prácticamente vacías y son una gozada.
Si necesitas más caña, siempre puedes alargar el recorrido hasta Veneciola que tiene un baño de lo más curioso, dónde se juntan los dos mares y San Pedro se une con La Manga. Vamos, que en mi opinión, es un paseo que merece la pena, aunque no sea calblanque 😉
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